En el mundo de los juegos en línea, las voces de los jugadores y los desarrolladores se hacen eco de un debate polémico: el futuro de la propiedad de los juegos frente a los servicios del modelo de suscripción. Este debate continúa después de que Larian, el fundador de Baldur's Gate 3, el desarrollador de Baldur's Gate 3, afirmara: «No encontrarás nuestros juegos en un servicio de suscripción».
Esta afirmación tuvo un gran impacto en los entusiastas de los videojuegos, ya que Ubisoft reveló su pronóstico que apuntaba a un futuro en el que los jugadores dejarían de tener juegos. Un usuario no se resistió al decir: «Ubisoft se lo puede perder», y expresó su descontento con el reciente desarrollo de juegos de la empresa. La excepción fue Anno 1800, de Ubisoft Mainz, que otro usuario calificó de «absolutamente genial».
Muchos expresaron su respeto por la integridad empresarial de Larian y aplaudieron su falta de «motivos de codicia». La popularidad de Larian se extendió por todo el foro: los usuarios dijeron: «Me encanta Larian» y admiraron la forma en que la empresa aparentemente se adhiere a las perspectivas que la comunidad de jugadores aprecia.
Sin embargo, se cuestionó la responsabilidad de la propiedad de un juego en esta era digital. Los usuarios debatieron si realmente son propietarios de juegos comprados digitalmente, lo que provocó restricciones a la reventa, el intercambio o la destrucción física. En una época en la que gran parte del contenido de los videojuegos depende de una plataforma digital como Steam, un usuario afirmó: «Ya no somos dueños de nada, así que no lo entiendo...»
El público de los videojuegos estaba dividido a la hora de decidir si las suscripciones se convertían en el único modelo disponible. Un usuario declaró explícitamente: «Si todo se convierte en una suscripción, dejo de jugar y busco un nuevo pasatiempo». Otros se mostraron más pragmáticos y prometieron esperar a que los juegos bajaran de precio antes de comprarlos.
En medio del debate, las previsiones de Ubisoft fueron recibidas con escepticismo, y un usuario las calificó sarcásticamente como el «Nostradamus moderno de la industria de los videojuegos». En un tono un tanto irónico, otro usuario estuvo de acuerdo con la predicción de Ubisoft, refiriéndose a su pausa personal de una década en la compra de juegos de Ubisoft.